viernes, 25 de abril de 2008

María Zambrano vuelve a casa

Mucho ha cambiado la calle Federico Macías de Vélez-Málaga, más conocida como calle Mendrugo, desde que hace ahora justamente un siglo una niña, de nombre María -llamada sin saberlo a convertirse en una de las pensadoras más reconocidas y profundas del siglo XX- abandonara con tan sólo cuatro años el primer hogar dando inicio a una vida de continuos viajes y peregrinaciones por medio mundo. No regresaría jamás.

En la actualidad, la calle Mendrugo luce un aspecto renovado tras las recientes obras de asfaltado acometidas. De ahí que, pese a la demora en el tiempo, no haya sido éste un mal momento para que la ciudad que la vio nacer y que, a fin de cuentas, la sacó del olvido, decida ponerle una placa de homenaje en la fachada del edificio en el que un día se levantó la casa de la autora de ‘Claros del bosque’.

Ni que decir tiene que el actual inmueble, dividido en dos viviendas, en poco se parece a aquel en que vivió la que sería discípula de Ortega y Gasset o Zubiri. Aunque, eso sí, la puerta de la cancela pertenece al edificio original, y aún se puede contemplar la marca que quedó cuando decidieron quitar la aldaba en forma de mano de mujer para enviársela a la hija de Don Blas y Doña Araceli a Madrid. Un gesto sentimental. Decía que su sonido le había acompañado siempre.

Pero, no es lo único de su casa veleña que quedó almacenado en la memoria de María. El profesor Juan Fernando Ortega, director y alma de la Fundación radicada en Vélez-Málaga, describía hace algunos años en un artículo publicado en la revista ‘La pluma y el tiempo’, titulado “El reencuentro de María Zambrano con su tierra”, el increíble nivel de precisión con el que la premio Cervantes de 1988 rememoraba estos primeros años de su infancia.

Cuenta Ortega que la filósofa “recordaba el arco que daba desde su calle paso a la plaza donde estaba situada la plaza del Carmen y el bar cantante de la próxima esquina donde a la noche, acompañado de la guitarra, desgranaba su cante hondo Juan Breva.” Pero, como apunta este estudioso, lo que más evocaba era “el patio de su casa, empedrado de pequeñas chinas, donde su padre la elevaba para que pudiera acariciar los limones del limonero que había junto al pozo, y el olor a jazmín y dama de noche en las noches de verano...”

Zambrano reivindicó siempre su herencia andaluza. No en vano perteneció a la estirpe de Séneca. Y, pese a la distancia geográfica, quiso reservar un lugar destacado a Vélez en su alma.
Así lo dejó grabado en un discurso enviado a sus paisanos cuando ya anciana, consumía desde la capital madrileña sus últimos y nostálgicos años de vida:
“Pueblo mío, Vélez-Málaga, estás en mi corazón y yo estoy dentro del tuyo. Que Dios nos bendiga, nos acoja.”
Un sentimiento que puede ser comprendido dentro de la cita zambraniana que reproduce la placa: “La pasión central de la vida es el amor”.

V Congreso Internacional

La actuación emprendida en la fachada de la casa natal de María Zambrano se inscribe dentro de los actos que desde el pasado martes se vienen celebrando en Vélez-Málaga coincidiendo con la celebración del V Congreso Internacional sobre su vida y obra, que como viene siendo habitual también, viene a coincidir con la fecha del nacimiento de la filósofa, un 22 de abril de 1904. De “rosa”, ha calificado el organizador, el profesor Juan Fernando Ortega, este prestigioso encuentro, parafraseando un comentario reciente de Berlusconi aludiendo al nuevo Gobierno de Zapatero, toda vez que la presencia de la mujer en estas jornadas supera a la de los hombres.

Pero, más allá de este hecho anecdótico, durante esta semana de conferencias y comunicaciones en torno a la obra de la autora de ‘El sueño creador’ –que se clausuran en la tarde de este viernes 25 de abril-, se pretende impulsar la proyección internacional de Zambrano, especialmente en aquellos lugares en los que como Estados Unidos se la conoce poco.

El tema elegido para este quinto congreso no puede resultar en este sentido más adecuado. Bajo el nombre “Europa, sueño y verdad” -que juega con el título de un célebre ciclo de conferencias de la pensadora-, se quiere poner énfasis en el carácter “pionero” -en palabras de Ortega- de Zambrano a la hora de analizar, ya desde la década del 40’ del pasado siglo, la realidad del mundo occidental.

No hay comentarios:

 
Copyright 2009 Apocalípticos e integrados. Powered by Blogger Blogger Templates create by Deluxe Templates. WP by Masterplan